Sopa de col y batata con cocos, muchos cocos
Porque aunque la ocasión la pintan parda, yo voy a darle sabor a este maravilloso fruto que recibe su nombre porque sus tres agujeros se asemejan a los ojos y la boca del temible fantasma infantil que ha acosado a nuestros chamaquitos generación tras generación - léase también churumbeles, dependiendo de la orilla atlántica en la que nos encontremos- . No, no lo digo yo sino la RAE que de esto sabe mucho. Y te preguntarás -imagino- por las razones que me impulsan una y otra vez a embadurnar mis recetas con palabras más o menos enredadas -véase como ejemplo esta ensalada con sus cosas del momento- sacadas de la vigésima segunda edición del de la lengua española... pues ni idea. De nuevo, carne de psiquiatra -supongo- porque tan solo puedo alegar en mi defensa que siento un incontrolable placer cuando descubro los doble sentidos que las palabras nos regalan. Ellas, que son tan cucas, nos ofrecen miles de términos para usar y rehusar a placer y de paso, dejar bien definida su maravillosa razón de ser, más allá de lo obvio, por supuesto, eso de comunicarse clara y llanamente. Como te digo, esa maravillosa posibilidad de liar al personal con un poco de labia aquí y otro poco allá, ¿no es genial?
coco2
Del port. côco, fantasma que lleva una calabaza vacía, a modo de cabeza.
1. m. Ser imaginario con que se mete miedo a los niños. 2. m. coloq. Gesto, mueca. hacer cocos 1. loc. verb. coloq. Halagar a alguien con fiestas o ademanes para persuadirle a hacer algo.
2. loc. verb. coloq. Dicho de los enamorados: Hacer ciertas señas o expresiones para manifestarse su cariño. parecer, o ser, un coco 1. locs. verbs. coloqs. Ser muy feo.
Y mira tú, que ésta es una palabra de apariencia tan obvia y contundente, que parece imposible hacer el lío a costa de ella; pues no. Como todas, tiene mucho pero que mucho jugo. Porque aquí donde lo ves, al coco lo usamos también para llamar feo al personal, para hablar de amor, para liarse la cabeza de pajaritos, para darse chascos, para hacer la rosca a alguien... en Cuba, para hablar de pájaros; en México para dar coscorrones; en Chile, potorros; y no confundir con los coquitos chilenos que son otro cantar, aunque en Puerto Rico los coquitos llevan ron y se beben por navidad, y en el Levante español, cocas. Y yo aquí hago una pausa y si tienes algún otro coco más en la cabeza -aparte de los cocos que los niños fabrican en sus intercambios de mucosas varias en los parvularios- digo, que si sabes de algún coco más, habla ahora o calla para siempre.
Mayo del 2020:
Acabo de renovar las fotos. No había vuelto hacer la receta desde entonces. La descubrí en su día en un blog donde la receta ya no existe así que borro la referencia original. Lo curioso, es que me he dado cuenta -hasta ahora no había asociado ambas sopas- que el parecido con este curry jamaicano es asombroso. La autora, de aquella sopa que ya no existe, es de origen colombiano así que supongo que lo mismo esta sopa tiene sus orígenes en la parte caribeña del país. La cantidad de los ingredientes viene un poco al gusto del cocinero. Puedes servirla acompaña de arroz blanco y trozos de aguacate que una amiga mía de Colombia me dijo en su día que ellos, en vez de pan, acompañan así sus guisos.
Acabo de renovar las fotos. No había vuelto hacer la receta desde entonces. La descubrí en su día en un blog donde la receta ya no existe así que borro la referencia original. Lo curioso, es que me he dado cuenta -hasta ahora no había asociado ambas sopas- que el parecido con este curry jamaicano es asombroso. La autora, de aquella sopa que ya no existe, es de origen colombiano así que supongo que lo mismo esta sopa tiene sus orígenes en la parte caribeña del país. La cantidad de los ingredientes viene un poco al gusto del cocinero. Puedes servirla acompaña de arroz blanco y trozos de aguacate que una amiga mía de Colombia me dijo en su día que ellos, en vez de pan, acompañan así sus guisos.
Ingredientes:
Preparación:
- 1/2 col pequeña
- un par de patatas
- 1 batata o boniato grande
- 1 cebolla mediana o dos chalotas
- 2 -3 dientes de ajo
- un poco de ají seco
- 1 cdta. de curry en polvo
- 1 cdta de comino en polvo
- 1/2 taza o algo más de salsa de tomate
- 1/2 limón exprimido
- 1 taza de coco rallado
- 1 taza de guisantes
- 1 lata (400gr.) de leche de coco
- 2 tazas (o más) de caldo de verduras
- sal
- un poco de aceite
Preparación:
- Picamos la cebolla muy fino. Troceamos la patata y la batata, y la col rallada muy fina. En una olla grande (sale bastante sopa) pones un poquito de aceite y doras la cebolla junto con los ajos que habrás machacado. Añade la col cortada en trozos muy finos y rehoga brevemente junto con el coco y las patas. Después, añade las especias, el tomate, el caldo y la leche de coco.
- Deja cocer a fuego lento unos 10 minutos. Entonces añades la batata o boniato, el limón y los guisantes. Deja que cueza a fuego lento hasta que los ingredientes estén tiernos.
Publicar un comentario