Ofentommerl, flotadores para la sopa

Pues ya hemos llegado. Cuarto domingo de adviento y la navidad ya está aquí. Ha nevado, estamos a -6ºC y ha lucido un sol maravilloso. Un día perfecto. Y como este ha sido un fin de semana de preparativos, he aprovechado que los chicos han bajado a quitar la nieve para terminar con mis paquetitos navideños. Cada año, preparo un detallín que acompañe la felicitación de nuestros vecinos y otro igual para las compañeras de la empresa de Günter...

Ya se ha convertido en costumbre y cada víspera de navidad hago acompañar a la felicitación con unos dulces caseros y un adorno de galleta para el árbol. En este afán mio de que todo sea lo más casero posible, las tarjetas este año las he hecho con cartulinas y papeles de colores. Unos cuantos rotuladores, y listo! Estoy de lo más contenta con el resultado. Así da gusto...

Pues esta vez mis vecinos y las chicas están de suerte. He hecho unos alfajores marplatenses de La Majuluta. Deliciosos. También tiene una receta estupenda Gabriela y de ella he cogido la idea de decorar con chocolate blanco los bizcochitos. Como aquí me ha sido imposible encontrar dulce de leche, los he rellenado, unos con una crema de moca y el resto con una crema de coco riquísima. Las encontré por casualidad a la que buscaba el dulce de leche. No me esperaba una cosa tan rica, la verdad. Y esas pelotitas nevadas, son unos dulces que ha hecho no hace mucho Cooking-love; unas bolitas de navidad hechas con almendras y coco rallado que son una delicia. Las he hecho más pequeñitas para que acompañen mejor a la hora de servir un surtido de dulces. En fin, que no hace muchos días iba de fracaso en fracaso, con idas de pelota tremendas como hacer masa de pan sin levadura, galletas de chocolate sin chocolate... rollos así de tremendos, te lo aseguro! Y ahora, estoy en racha...

Y con más regalitos:-)Tengo nuevo libro de cocina. Un librillo de esos que a mi me gustan con sopas por todas partes. Se trata de una recopilación de recetas de granjeros de mi comarca. Lo bueno de estos libros, es que todos sus ingredientes son los autóctonos de temporada. Eso me ayudará a manejarme mejor y así, poco a poco, aprender a comer con sentido: cada cosa, en su tiempo... Pero la receta de hoy, se pasa por el forro el cartel de temporada; vale para un roto y un descosido.

Se trata de un Einlage, es decir, unos flotadores para la sopa (como ya te habrás imaginado, ésta no es la traducción literal). En España me pasaba la vida comiendo sopas con pasta y desde que estoy aquí los fideos los pruebo muy de vez en cuando. Se trata de una masita muy sencilla y rápida de hacer que le da una importancia a la sopa increíble... por cierto, con qué sopa los hemos comido... esta vez va ser un misterio... no insistas, que no voy a soltar prenda. Lo cierto es que da igual, cualquier sopa va de maravilla: caldos ligeros, con tropezones, caldos contundentes, cremitas ligeras... va bien con lo que quieras. Y si sobran y no te apetece más sopa, puedes servirlos como postre bien apañaicos con azúcar glas por encima, una salsa de frutas y a zampar!

Ingredientes para hacer los Ofentommerl:

• 3 huevos
• 3 cucharadas de harina
• algo de leche
• sal, pimienta y una mini pizca de nuez moscada
• mantequilla para untar el molde

Preparación:

1. Pues el libro es bien majo, pero parco en palabras. No explica mucho ni da cantidades concretas. La idea es hacer una masa líquida parecida a la consistencia de la masa de crepes; muy líquida. Así que bate todos los ingredientes y añade leche hasta que consigas esa textura. 
2. Calienta el horno a 200º, unta un molde plano con mantequilla y hornea un rato hasta que esté dorado. Apaga el horno abre un poco la puerta y deja dentro el molde para que vaya perdiendo el calor poco a poco. Lo sacas, deja que se enfríe un poco. Lo cortas en trocitos y listo.

Hoy la sopa la pones tú, vale?

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