Coca de San Juan

¿A dónde vas tan coca? Pues a dónde voy a ir; a la noche de San Juan, a dejarme comer enterita hasta el último piñón (yo no, la coca), que en la noche más corta del hemisferio norte y la más larga en el sur, hay muchas cosas que hacer para purificar nuestras almas, limpiarnos de trastos inservibles y andar por el mundo con el coco más despejado y mirando para adelante con frescura. Porque que el sol alcance su cenit sobre el Trópico de Cáncer o de Capricornio, a mí, que soy Sagitario, me la trae al fresco. Lo importante, ya se celebre con frío con calor, es liberarnos de cargas psico-meta-cotidianas (no, no estoy hablando de drogas) y dejarnos llevar por los ritos de fuego, agua y algún que otro truquillo de bruja.
Y esta fiesta, menos mal, no es un invento de coca-cola. Afortunadamente, los romanos ya celebraban las hogueras en honor al dios Juno y le hacían todo tipo de ofrendas (nada del otro jueves porque las ofrendas a los dioses era el pan de cada día) pero muy posiblemente la "hogueramanía" la desataron muchísimo antes las culturas nórdicas, que se lo contagiaron a las sajonas y celtas, y de ahí hasta la costumbre de comer coca de Sant Joan, pues hay un párrafo y medio.
En la noche de San Juan, el Lithafest, Coamhain, Mediosaminos, Là Fhéile Eoin, An Fhéill-Eoin, Gwyl Ifan, Golowan o Alban Heruin... llámalo como más te apetezca aunque creo que si lo dejamos en la noche de las hogueras nos vamos a entender de maravilla... decía, que en esta noche, los druidas y bruj@s salían al bosque a por hierbas medicinales porque las recolectadas en el equinoccio tenían mayor poder de curación. Las mozas casaderas recogían flores de manzanilla, caléndulas, lavandas y espliegos que colocaban debajo de la almohada para soñar con el futuro marido. El ruibarbo y los espárragos son recolectados en este día los más sabrosos y, quién pueda, que se dedique a recoger grosellas que se cuenta que son las más ricas de la temporada.
En fin, que así andaba el mundo tan contento cuando llegó el cristianismo y dijo que naranjas de la china. A la gente le gustaban las valencianas así que se creó una tensión de la leche. La cosa era que al que pillaran con la pira, se la iba a cargar: para ser más exactos, a chamuscar. La amenaza no funcionó y la gente dijo algo como "pase eso de la flagelación por semana santa pero la juerga, señores, esa no nos la toquen que la vamos a liar". Pues hala, las primeras autoridades eclesiásticas romanas pusieron en marcha su plan B: celebremos la festividad de San Juan y para festejarlo vamos a encender hogueras y si pasáis por misa haremos la vista gorda y hasta os dejaremos que hagáis algún conjurillo que otro. Y casi casi, hasta hoy salvo por algún que otro detallín. Por cierto, en alguna parte de esta historia debería hacer presencia un panadero al que le diera el punto de hacer unas tortas de pan dulce con frutas y piñones pero no he conseguido documentación fidedigna al respecto. Como siempre, la parte más jugosa de la historia se nos oculta al populacho ¡mecachis!
Lo que no os voy a ocultar, es que esta coca de Sant Joan la propuso Maragda como reto para las cukin y como a mi esto de los bollos y de amasar me va mucho pues me he apuntado al sara'o. Nunca la había hecho ni la había probado. Seguí los consejos de Maragda y me basé en la receta de Mercè con alguna variación.
Lo que no os voy a ocultar, es que esta coca de Sant Joan la propuso Maragda como reto para las cukin y como a mi esto de los bollos y de amasar me va mucho pues me he apuntado al sara'o. Nunca la había hecho ni la había probado. Seguí los consejos de Maragda y me basé en la receta de Mercè con alguna variación.
Ingredientes para 2 piezas:
Preparación:
- 500gr. de harina de fuerza
- levadura deshidratada o fresca (12gr. de la fresca)
- 200ml. de leche a temperatura ambiente
- 70gr. de azúcar
- 60gr. de mantequilla en pomada
- 2 huevos batidos
- una pizca de sal
- vainilla
- ralladura de media naranja y medio limón
- opcional: unas gotas de agua de azahar
- opcional: unas semillas de anís
- Para pincelar la superficie:
- separa un poquito del huevo y lo mezclas con 1 cda. de agua
- frutas escarchadas
- un puñado de piñones
- crema pastelera (o un sobre de pudding)
Preparación:
- Disuelve la levadura en una parte de la leche. La otra, la templas un poco y dejas que se de derrita la mantequilla.
- Pon los ingredientes secos en un bol, lo mezclas un poco y después añades los húmedos. Una vez todos juntos, lo bates con unas varillas eléctricas o con un procesador. Deja que la masa repose unas 2 horas bien tapada para que no pierda humedad.
- Una vez leudada, divide en dos la masa. Con ayuda del rodillo y en la encimera ligeramente enharinada, estira la coca con la forma que más te guste (ovalada o más cuadradita). Con ayuda de un cuchillo, haz los cortes transversales. Deja que repose unos 20 minutos.
- Mientras haz la crema siguiendo las indicaciones del paquete y deja que enfríe. Aprovecha uy ve calentando el horno a 190ºC.
- Pincela la coca con el huevo y con ayuda de una manga pastelera, pon hileras de crema siguiendo las líneas que hemos hecho con el cuchillo. Decora con las frutas escarchadas y con piñones. Si lo deseas, puedes espolvorear también un poco de azúcar por encima pero para mi gusto es demasiado dulce.
- Hornea hasta que la coca tenga un color dorado y vistoso.
- Elvira de Los cerezos en flor
- Ly de El olor del café
- Maragda de La quinta del Luculus
- Mª José de Dit i fet
- Mercè de Cuina per a llaminers
- Núria de ConinArte
- Pikerita de La cocina de Pikerita
- Rosa de Quocinando
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