Cerdo agridulce de Yvonne
Primer día de cole. Muchas emociones. Lucas ha sido el primero en despertar. Por fin, el día cero. Hoy está feliz como una perdiz. Hoy ha tocado jugar niños, muchos niños sin mamá y papá de por medio. Día agridulce, donde hemos dejado a todos sus amiguitos en la puerta de la escuela y nosotros hemos seguido hasta el otro lado de la manzana, al kindergarten. Pero también alegría inmensa al encontrarse de nuevo con sus colegas de casi 3 años de andanzas que, como él, cumplen años en otoño o navidad y deberán esperar todo un año para cruzar el inmenso y macizo portal de la escuela primaría... sí, me he pasado ocho pueblos. Cualquiera que conozca la Schule de Seegraben sabe que he dramatizado la escena a lo Tim Burton como poco...
Para mí, también jornada agridulce, no iba a ser yo menos. Recupero algo de intimidad, unas horas yo sola al más puro estilo adulto pero también abandono la maravillosa vida desordenada y anárquica de las mañanas veraniegas, donde nos levantamos cuando nos apetece, desayunamos sin apuros y planeamos qué hacer sobre la marcha. A partir de hoy llega el levantarse pronto para que no se haga tarde, servir el desayuno con tiempo para que no haya que apretar tuercas, planear las tareas para que todas ellas encajen antes de tener que ir al mediodía a recogerle.. hoy sin ir más lejos, el fregadero está lleno, los huevos que me han traído esta mañana aquí están, a mi vera, esperando embarcar en el frigorífico. La lavadora sin poner, nuestra cama sin hacer... y yo aquí, escribiéndote esta receta, acto a priori trivial y ligero pero que guarda un significado tremendamente humano y significativo...
Hoy doy gracias a la vida, por tener la vida que tengo. Por poder permitirme la crianza de mi hijo a tiempo total, por verle crecer a diario sin levantar los ojos de los suyos. Por vivir sin agobios, sin muchos lujos pero sin angustias por llegar a fin de mes. Por tener un Kindergarten que tan bien cuida de la salud y el bienestar de mi enano. Por tener las bicis y poder usarlas a diario sin miedo a que nos maten en cualquier cruce. Por tener unos hijos sanos, que el día de mañana montarán su propia familia y cometerán los mismo errores de sus padres que son los de sus abuelos y sus bisabuelos y un largo etcétera en el árbol genealógico de los Martín de los Santos...
Porque no todos corremos la misma suerte. Muchos niños como el mío pequeño, viven expuestos a los pesticidas de las plantaciones bananeras. No sé si te habrás fijado en algún documental que los racimos de plátanos se cubren con bolsas de plástico. Pues van impregnados en agrotoxicos. Estas bolsas, bien por negligencia o por acción del viento vuelan por doquier llegando incluso a acumularse en las esquinas de las calles o como llegué a ver en una instantánea a acumularse en el patio de una escuela rural. La imagen, horrible, desde luego. Niños de un poblado indígena jugando en la puerta del cole con bananeras por todos lados y montañas de bolsas azules por todas partes... estos niños, ya están condenados....
Daytonia está rodeado por dos grandes bananeras con una intensiva utilización de pesticidas químicas. El estudio reveló que la distancia entre las casas y las bananeras oscilaba entre los 15 y los 80 metros y que el colegio y el campo de fútbol, donde suelen jugar los niños de la zona, están situados muy cerca de las bananeras, sin ningún tipo de barrera física. Los bananos producidos aquí se exportan a los Estados Unidos y Europa. El impacto de la exposición a este organofosforado sobre la salud incluye ideas suicidas, problemas respiratorios y malformaciones congénitas.
Fuente: Bananalink
La lucha contra los pesticidas en Latinoamérica y África es casi misión imposible. Cualquier pequeño avance, cualquier iniciativa puesta en marcha es posteriormente paralizada por los gobiernos o por las propias multinacionales. Hay un montón de proyectos de mejora ambiental y desarrollo agrícola que quedan en suspenso... no se niegan pero no se cumplen, el peor de los castigos...
Nosotros podemos empezar a marcar el cambio. Podemos demandar estos productos "limpios". Productos bio y de precio justo. Somos los únicos que podemos cambiar la tendencia. He encontrado una empresa española que comercializa este tipo de frutas por Europa. En España no, porque parece que no hay interés. No hay demanda... ahí queda, cuando te preguntes porque no encuentras una piña o un mango ecológico que sepas que no lo hay porque nadie lo demandó...
Una vez más, la receta es de Yvonne. Como todas las suyas, deliciosa. Ésta de hoy se la dio el propietario de un restaurante chino en Bélgica, en sus años de estudiante, un señor con una larga y finita barba blanca que tuvo a bien pasarle su fácil y sabrosa receta del cerdo agridulce...
Ingredientes:
Para la maceración:
Para la salsa:
Para freír la carne :
Preparación:
Prepara una pasta cremosa con agua y harina y pasa por ella los trozos de carne bien escurridos. En un wok, calientas el aceite y fríe la carne hasta que esté dorada y crujiente. Finalmente mezcla la carne con la salsa y sirve a continuación. Queda perfecto con un arroz blanco o salteado. Yo lo he servido con un arroz de jazmín salteado en cebolletas y zanahoria muy picadas y con un huevo revuelto.
- 500 gr solomillo de cerdo cortado en dados
- 1 yema de huevo
- 1/2 cuchara de salsa soja
- 1 cuchara agua fría
- 1/2 cucharita de sal (usé dos cucharadas más de soja)
- 2 pimientos verdes (los míos son rojos por puro maquillaje, para que quedara más roja la salsa)
- 4 rodajas de piña en almibar (o equivalente en piña fresca)
- 2 cucharas de aceite
- 2 cucharas de vinagre (usé 3 cucharadas de vinagre de arroz)
- 4 cucharas de azúcar (usé 2 cucharadas de melaza)
- 4 cucharas de ketchup
- 5 cucharas de agua fría (usé además un chorro generoso del jugo de la piña)
- 3 cucharas de maicena (yo con 1/2 he tenido suficiente ya que la salsa no me quedó caldosa)
- 1 cucharadia de sal (un chorro de salsa de soja a gustos)
- 1 cucharadita de aceite
- una masa cremosa de agua y harina para rebozar
- abundante aceite en un wok
Preparación:
Mezcla todos los ingredientes de la maceración en un bol. Añade la carne y deja que repose unos 30 minuto removiendo de vez en cuando. Mientras, corta los pimientos muy muy finitos. Escurre la piña y la cortas también muy muy picada. Calienta un par de cucharas de aceite en una sartén y rehogas la piña y los pimientos. Ve añadiendo los demas ingredientes de la salsa y dejas que cueza lentamente.Si se consume mucho el líquido, añade un poco más de agua.
Prepara una pasta cremosa con agua y harina y pasa por ella los trozos de carne bien escurridos. En un wok, calientas el aceite y fríe la carne hasta que esté dorada y crujiente. Finalmente mezcla la carne con la salsa y sirve a continuación. Queda perfecto con un arroz blanco o salteado. Yo lo he servido con un arroz de jazmín salteado en cebolletas y zanahoria muy picadas y con un huevo revuelto.
- consume local...compra más en fruterías y pequeños establecimientos evitando las grandes cadenas que están hundiendo los precios en origen.
- cuando tu bolsillo te lo permita, compra productos de precio justo... si no puedes siempre, ayuda de vez en cuando con pequeñas compras.
- piensa que ciertos productos bio no son ni mejores ni peores para tu salud pero sí lo son para quienes los trabajan.
- si los gobiernos y organizaciones internacionales no miran por el bienestar de la personas, hazlo tú... no los condenes al olvido.
- deseo una vida más justa y más sana, como la mía... ojalá algún día, todo el mundo tenga lo que yo tengo.... ni más ni menos.
Cómo colaborar:
La idea es hacer un libro de recetas de piñas y bananas. Si tienes un blog, realiza un llamamiento a la colaboración y "dona" una receta tuya. Ya publicada o nueva, da igual. Algo rico.
Si no tienes blog, puedes mandarme la receta a mí. Si no tienes tiempo para cocinarla y fotografiarla, lo haré yo misma en tu nombre.
Mueve este llamamiento de donación como quieras, con una nueva acción o participando de ésta. Por mi parte, me comprometo a reunir todas las recetas y hacer un libro en PDF que donaremos a Frutas justas. Las recetas puedes mandarlas a maitemsalonso@gmail.com , dejando link en un comentario a esta entrada o contactándome a través de facebook.
Tenemos hasta final de mes, pero si necesitas más tiempo, no pasa nada, te esperamos un poquito más.
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