Chow mein o fideos fritos con verduras para cuidarnos el cardio

Día de publicar. ¿Realmente necesito un día? creo que sí, sino estaría otra vez publicando de uvas a peras. Nada como una buena cabezonada a tiempo para evitar dejadas temporales que sin comerlo ni beberlo uno piensa que pasaron un par de días y fueron un par de meses. El tiempo es lo que tiene, que lo carga un despiste y se dispara solo. No tengo mucho tiempo la verdad sea dicha así que hoy me conformaré con hacerte un repaso de mi situación en general. Decirte que la gripe entró en nuestra casa sin haberla invitado y ya sabéis el genio que gasta, cuando dice que se queda no hay ibuprofeno que la eche del sofá. Se nos ha quedado a vivir por unos días y el pobre Luquitas ha pasado 3 días de fiebre horrible. Qué penica más grande dan los hijos cuando están malos. Normalmente, el siguiente en la cadena de contagio es Günter pero creo que esta vez le estoy cogiendo ventaja. Por lo tanto, me apresuro a contarte antes de que sea demasiado tarde...
Lo primero, que sepas que tengo de momento prohibido todo tipo de sobresalto o estrés vario, derivado o malversado. De ningún modo. Oficialmente he pasado de tener la tensión alta a ser un animalillo humano hipertenso. La diferencia entre una cosa y otra es muy simple. Desde hace un par de años el médico me dice "tiene usted la tensión alta. Debe vigilarsela" Tú dices, vale y el médico se lo cree. Eso es tener la tensión alta. Esta vez la cosa ha sido ligeramente diferente. " A ver, tiene usted la tensión muy alta y hay que vigilarla a diario. Debería comprarse el aparatito." Y qué hago, contesto yo. Tomársela, insiste él. Y si está alta, qué tengo que hacer? y aquí pillada. Después de reflexionar un par de segundos, me dice. A ver, primero se la vigilo yo y luego ya le cuento. Esto significó pasar 24 horas con un tensiómetro al brazo que se autoinflaba casa 15 minutos. Día de sofá sin mover ni una pestaña. Al día siguiente, me quita el aparato, lo enchufa al ordenador y me hace un tercer grado, "Muy bien Frau Nobis, que pasó el día de ayer a las 12 de la mañana?". Aquí me dejó a cuadros. Pues nada. No pasó nada, contesto. A las 3 de la tarde se echó usted un sueñecito, verdad? Glups, pues sí. Y esta mañana, a las 8 , qué ha pasado? y a y cuarto? pues nada de nada. Estaba sola en casa y me vestía para venir a verle... le juro doctor por lo que usted quiera que no he hecho nada ni bueno ni malo...
Al punto estaba de llamar a mi amiga Sonja que es abogada cuando por fin, el Sr. Doctor me explica. Ha tenido usted en un día 3 picos de 20 (aquí se dice 200) y eso es muy peligroso señora mía! y yo casi me hago caquita encima porque estas cosas que uno no sabe medir las consecuencias como que imponen mucho. Salí de la consulta, con las pastillicas para la tensión en una mano, en la otra un spry de nitroglicerina y en el bolso un volante para el cardiólogo. "Y escúcheme bien Liebe Frau, hasta que este último no la inspeccione el cardio usted no se me estresa ni una chispita". Y así estoy. Sin saber que cara poner, en esa fase de puede que no sea nada o que sea algo o que sea todo. Imposible sacar nada en limpio. El médico pone cara de póker y yo de imbécil. Así es ahora y así ha sido siempre...
Pero como especular es gratis, yo te voy a decir que va a pasar. Una de dos. Que no sea nada. Entonces me dirá que tengo que llevar una dieta severa, más ejercicio, que debo ser disciplinada que me juego la salud, que me puede pasar algo muy grave, etc. etc. etc. Dos, que sea algo. Entonces dirá que no me preocupe, que haga vida normal, que me cuide pero que no me disguste por nada que entre él un para de colegas me van a dejar como los chorros del oro. "Usted no se preocupe por nada que aquí estamos nosotros". Da igual lo que te pase. Hasta donde mis conocimientos en medicina llegan siempre se llega al mismo discurso. Si no es nada, preocúpate. Si es algo, vida normal y no se apure que no hay de qué...
Y así las cosas que sepas que paso de todo. Estoy en fase pasota existencialista. Todo se me cae por el forro. Que Leonardo di Carpio gana un Oscar? pues que lo gane! porque mira, el muchacho es bien guapete y se lo merece, ya no tanto por haber hundido el Titanic que eso bien mirado no tuvo mérito. Pero desde A quién ama Gilbert Grape se lo ha merecido y mucho. Esta vez, ha tenido que ponerse todo guarrete y asalvajado para llevárselo y quitarse ese frío de encima por la última que habrá renacido el hombre pero se le debió de quedar un gripazo como que el comienzo a calzar ahora mismito. Así que me dejo de más gaitas, que no retiren la alfombra roja que voy a pasear estos fideos fritos con verduras que es mi penúltima receta de fondo de armario. Un día le tiré unas fotos por si acaso y mira que bien me viene hoy. Una opción rápida y sabrosa para cuando hay prisas...
Ingredientes:
Preparación;
- 250gr. de fideos chinos
- 1/4 l. de caldo de pollo
- algo de pimiento, col y brotes de soja
- un poco de aceite de coco o de sésamo
- un chorrrito de salsa de ostras y de soja
- a la hora servir, unas gotas de limón y un poco de guindilla en polvo
Preparación;
- En el mismo wok, pon el caldo a hervir y cuece los fideos. Retira la pasta cuando esté al dente y resérvala. No tires el caldo de la cocción.
- Pon un poco de aceite en el wok, y saltea las verduras que habrás cortado en juliana (muy picada en pequeñas tiras). Rehoga brevemente sobre unas gotas de salsa de ostras.
- Añade la pasta y un poco del caldo de cocer. Añade la salsa de soja y rehoga unos 15-20 segundos. Sirve inmediatamente. Condimenta con unas gotas de limón y guindilla al gusto
Publicar un comentario