El ajoblanco de Lolibel que también es el de mamá

Querida Lolibel,
Esta entrada estaba cantada, no podía ser de otra manera. El cuándo era lo que falta y si viene hoy es con toda la intención. Primero porque ayer fue el día de los enamorados. Me lo pasé fregando como una posesa, con la aspiradora arriba y abajo y el Günter poniéndome ojillos y abrazándome cada dos por tres: "Ay, muchas gracias Mampsi, me has hecho muy feliz" ... más o menos que ya sabes que las declaraciones literales no se me dan bien. Yo fregoteaba por algo muy simple, nada de rollos morbosos ni fantasías sexuales. El sábado tuvimos fiesta en casa porque el rubiales cumplió 40 años y había que celebrarlo por todo lo alto. Comimos, bebimos y reímos desde las 6 de tarde -hora típica de convocatoria fiestera- hasta las 4 y media de la mañana. A mis vecinos ni los he visto, tienen que estar contentos.
Preparé un buffet que daba gusto solo con mirarlo. Fue comenzar a zampar y el grado de gusto subió a gloria. Jugué con los sabores a placer, cada fuente contenía una paleta de sabores diferente. Algunos por simples arrancaban lágrimas y otros por exóticos, quizás no tanto para nosotras pero para un paladar centro-europeo sonaban a música celestial. Pero si algo de mi mesa eclipsó el protagonismo de Günter, fue el ajoblanco, tu receta que también es la de mi mami que tantas veces la vi prepararlo. Algo tan neutro a la vista, que cuando contaba lo que era, hacía bailar los ojos de sorpresa y a la primera untada, sonaba tal batería de uhmms que ríete tú de los cañones de Navarone...
Yo que ya me imaginaba algo, guardé un poquito para poder sacarle foto y traerlo aquí. Ya ves que hoy el día anda tristón, lloviendo a ratos pero con una luz preciosa, muy melancólica que clama a recuerdos y a cariño. Hoy me ha parecido el día perfecto para que tu ajoblanco vea la luz, porque este homenaje le tenía pendiente, por ti, por lo mucho que te quiero, por mi mami, que tanto la recuerdo y que por cierto, en 3 días es su cumpleaños... que bonito se me hace haber esperado al aniversario de Gü para que la receta pudiera venir tan cargada de cariños, tan bombazo sentimental y es que a todos que les contaba les decía: este es mi sabor a infancia... no es el único, pienso en mi niñez y junto al ajoblanco me vienen el sabor de los mantecados y buñuelos de Daimiel, los bocadillos de calamares de Madrid que mi abuelo no dejó domingo sin invitarnos... un triángulo de raíces donde el corazón y los juguillos gástricos se confabulan para no olvidar quién soy y de donde vengo.
Pero este ajoblanco es un homenaje a ti, a lo linda que eres, siempre presta a todos, con esa fatiga emocional tuya porque no llegas a más, a cuidar a quien no tiene, a recargar al que le falta, siempre con alguien en la cabeza y en el corazón. La vida, que sabe mucho, te ha dado una familia generosa que te mima a rabiar ¡menos mal! porque tú nunca tienes tiempo para ti :-) Por la parte que me toca, te quiero agradecer todo el cariño me has dado en estos tropecientos años que llevamos blogueando... por cierto, ¿sabes cuando nos conocimos? por Erika, que organizó el hemc#38 sobre "cosas de mi pueblo" y que yo participé con la jibia en salsa al estilo negrero... ya ves, unidas por esa Almería que siempre llevas contigo, tan en el alma, tan enredada en tu personalidad que ya no eres Lolibel, eres Lola de Almería.. como si no hubiera Lolas en la provincia!!! pero cuando hablamos de ti y decimos Lola, qué Lola? la de Almería... única! mi Lola es única como un ajoblanco que no es Ajo blanco sino ajoblanco. Que es tuyo y de mi madre. Y desde hoy, mío también.
Yo que ya me imaginaba algo, guardé un poquito para poder sacarle foto y traerlo aquí. Ya ves que hoy el día anda tristón, lloviendo a ratos pero con una luz preciosa, muy melancólica que clama a recuerdos y a cariño. Hoy me ha parecido el día perfecto para que tu ajoblanco vea la luz, porque este homenaje le tenía pendiente, por ti, por lo mucho que te quiero, por mi mami, que tanto la recuerdo y que por cierto, en 3 días es su cumpleaños... que bonito se me hace haber esperado al aniversario de Gü para que la receta pudiera venir tan cargada de cariños, tan bombazo sentimental y es que a todos que les contaba les decía: este es mi sabor a infancia... no es el único, pienso en mi niñez y junto al ajoblanco me vienen el sabor de los mantecados y buñuelos de Daimiel, los bocadillos de calamares de Madrid que mi abuelo no dejó domingo sin invitarnos... un triángulo de raíces donde el corazón y los juguillos gástricos se confabulan para no olvidar quién soy y de donde vengo.
Pero este ajoblanco es un homenaje a ti, a lo linda que eres, siempre presta a todos, con esa fatiga emocional tuya porque no llegas a más, a cuidar a quien no tiene, a recargar al que le falta, siempre con alguien en la cabeza y en el corazón. La vida, que sabe mucho, te ha dado una familia generosa que te mima a rabiar ¡menos mal! porque tú nunca tienes tiempo para ti :-) Por la parte que me toca, te quiero agradecer todo el cariño me has dado en estos tropecientos años que llevamos blogueando... por cierto, ¿sabes cuando nos conocimos? por Erika, que organizó el hemc#38 sobre "cosas de mi pueblo" y que yo participé con la jibia en salsa al estilo negrero... ya ves, unidas por esa Almería que siempre llevas contigo, tan en el alma, tan enredada en tu personalidad que ya no eres Lolibel, eres Lola de Almería.. como si no hubiera Lolas en la provincia!!! pero cuando hablamos de ti y decimos Lola, qué Lola? la de Almería... única! mi Lola es única como un ajoblanco que no es Ajo blanco sino ajoblanco. Que es tuyo y de mi madre. Y desde hoy, mío también.
Y antes de cortar esta transmisión.. mira quién también salió a flote. Hablo de afectos y sale Erika a relucir. No podía ser de otra forma. Un besazo quería mía! y que este ajoblanco nos una en lo bueno y en lo malo hasta que el divorcio nos separe... pero como no estamos casadas lo nuestro es para toda la vida :-D
Ingredientes:
receta original por Lola de Almería
Notas:
Preparación (textualmente en palabras de Lola:
"De nuevo es una de las elaboraciones que menos trabajo dan y según la batidora que utilices obtendrás una textura u otra, la Thermomix es una joya para esto. Aunque el auténtico ajoblanco se hace a mano de mortero, también sirve la minipimer.
A falta de tiempo, introduce en el vaso de la batidora el pan remojado y escurrido suavemente, la almendra y el ajo, tritura con la batidora y emulsiona a continuación con el aceite de oliva, el vinagre de Jerez y sal.
Pruébalo para rectificar si fuera necesario, debe de quedar como una crema melosa, tipo mayonesa o crema de verduras espesita. Deja enfriar en el frigorífico hasta el momento de tomarlo.
Es habitual acompañar el ajoblanco con uvas y melón cuando es mas liquido tipo sopa.
También untado en pan tostado con: con anchoas o jamón o sólo, con judias verdes cocidas, patatas asadas, pero puedes ponerle lo que desees.
Bueno ya solo deciros ¡¡¡ Que aproveche ¡¡¡¡ y que si no os sale paséis por mi casa y os enseño."
receta original por Lola de Almería
- 125gr. aproximadamente de pan viejo
- Agua
- 2 dientes de ajo
- 250gr. de almendras crudas
- un chorro generoso de aceite de oliva
- sal y vinagre de vino a gusto de la casa
Notas:
- A la que mojo el pan, suelo ablandar las almendras. Antes, cuando uno se iba a cogerlas (he tenido ese gusto) sabía que estaban frescas y jugosas. Del supermercado véte tú a saber así que las remojo para que no queden harinosas ( o algo peor). Para ello, hiervo agua, y pongo el pan en remojo junto con las almendras peladas con una 3 hora mínimo antes de usarlas. Este ajoblanco está hecho con minipimer y ha reposado un par de días.
- Copio y pego directamente la preparación de Lola porque es tan entrañable que temo romper el hechizo si yo lo hago:-P
"De nuevo es una de las elaboraciones que menos trabajo dan y según la batidora que utilices obtendrás una textura u otra, la Thermomix es una joya para esto. Aunque el auténtico ajoblanco se hace a mano de mortero, también sirve la minipimer.
A falta de tiempo, introduce en el vaso de la batidora el pan remojado y escurrido suavemente, la almendra y el ajo, tritura con la batidora y emulsiona a continuación con el aceite de oliva, el vinagre de Jerez y sal.
Pruébalo para rectificar si fuera necesario, debe de quedar como una crema melosa, tipo mayonesa o crema de verduras espesita. Deja enfriar en el frigorífico hasta el momento de tomarlo.
Es habitual acompañar el ajoblanco con uvas y melón cuando es mas liquido tipo sopa.
También untado en pan tostado con: con anchoas o jamón o sólo, con judias verdes cocidas, patatas asadas, pero puedes ponerle lo que desees.
Bueno ya solo deciros ¡¡¡ Que aproveche ¡¡¡¡ y que si no os sale paséis por mi casa y os enseño."
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