patata-brócoli-strudel y salmón con salsa de champiñones

Pues aquí estoy; he pasado como 20 minutos tonteando con el ratón. Me he ido con los chicos al sofá. Lucas se ha dormido y he vuelto. Otro tanto, tonteando haciendo clic aquí y allí esperando a ver si me inspiro. Llaman a la puerta. Hubert ha pasado un ratico. Otra vez, aquí. Sentadica y esperando que algo pase... jeje, gracias destino! Gurú ha publicado. Cachis, que bien cuenta las cosas. O que bien expresa lo que no cuenta... Ya me gustaría a mi... De nuevo más tonteo hasta que me pongo a escribir y te cuento que no se que escribir. No suelo hacerlo por la noche. Puede que sea el silencio que no me inspira... Na' (no en dialecto) no lo creo. Mira que llevo todo el día así, como con la cabeza hueca. Hoy me siento un poco a lo trocito de carne con ojos. Mis sesos están como los de Schneemann que hemos hecho en el jardín... congelados!
Ahora, que andaré por la vida con el cerebro paralizado pero mis tragonas mandíbulas no paran las tías. A la que ando con estos dilemas de si pienso o no pienso, me he zampado una crema de mascarpone con dulce de leche. Así, a lo tonto. A la chita callando... y ni te cuento como estaba! flamboyante... Por cierto, ya me he enterado de lo que significa flamboyante! Es una palabra que uso mucho cuando quiero expresar algo grandioso, la bomba, la caña... lo que sea, es flamboyante. Pero no tenía ni idea de lo que significaba. Adopté la palabra hace muchos años, cuando un chico le dijo a una amiga mía que estaba flamboyante. Esa noche ella estaba espectacular de bonita así que se quedó en nuestro vocabulario de cosas preciosas. Y Gurú Masala me ha explicado lo que significa (o lo que muy probablemente significa). Hay un árbol muy popular en Asia que se llama flamboyan y que está lleno de flores rojas muy hermosas. Es grande de tamaño así que imagino que contemplarlo por primera vez debe de ser de lo más.... flamboyante!
Y hoy hemos comido strudel de patata y brócoli con salmón en una salsa de champiñones. Hoy, que era día de sopa en más de media Europa nosotros comemos strudel... ya te digo que ando con los sesos más para allá que para acá... pero delicioso.
Ingredientes para el strudel:
Ingredientes para la salsa:
Preparación:
- 500gr. de patatas
- 400 gr. de brócoli
- 150-200 gr. de salmón ahumado (a tu gusto)
- 2 cucharadas de crème fraîse
- sal de especias
- masa de strudel o philo (si te es más fácil con masa quebrada de hojaldre)
Ingredientes para la salsa:
- 250 gr. de champiñones
- 2 chalotas
- 100 gr. de bacon o panceta
- 1/2 cucharada de mantequilla
- 1/4 l. de nata líquida light
- sal de especias y pimienta blanca
Preparación:
- Pon las patatas a cocer en agua con sal. En otro recipiente haces lo mismo con el brócoli pero con menos agua (un para de dedos); si tienes caldo mucho mejor. Yo he usado un caldo bio deshidratado de verduras que está muy sabroso. Una vez en su punto, pelas las patatas y escurres el brócoli hasta que quede seco. Pásalos por el pasapuré o usa un prensador de patatas. Una vez que tengas la masa, añade la crème fraîse y el salmón en trocitos.
- Si usas masa de strudel tipo philo usa por lo menos 3 capas porque si no de seguro se romperá. Extiende un trapo limpio. Encima, las capas de masa. Pon ahora el relleno de forma uniforme cerca del extremo que esté próximo a ti. Con ayuda del trapo empieza a enrollar con mucho cuidado para no romperlo.
- Hecho el rollo, pásalo con mil cuidados a una placa de horno con papel de hornear. Ahora coge los extremos y los pliegas por debajo. La cantidad de puré te va a dar para 2 piezas. Tenía, de unos panecillos que había horneado antes, yema de huevo y leche que aproveche pincelando el strudel pero normalmente no se hace. Queda bien bonito al natural.
- La salsa es bien sencilla. Corta los champiñones en rodajas. Las chalotas muy picaditas y la panceta como te apetezca. Pon mantequilla en un sartén ancha y dora todos los ingredientes al tiempo. Las chalotas no necesitan tanto tiempo para pochar como las cebollas así que lo puedes dorar todo a la vez. Al final, salpimienta y cubre con la nata líquida. Mantén la salsa calentita hasta que la vayas a servir. Intenta que no se enfríe porque a la nata le da por cuajarse y se puede quedar muy espesa. Si esto te pasa, pon un poquito de leche y listo. Buen provecho!
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